lunes, 28 de abril de 2008

Mamá, creo que soy existencialista

Y muchas veces me da hueva el género humano. Como esta semana. En serio, no podía. Iba a fiestas y hablaba con personas que no me interesaban pero con mi sonrisota de estudiante de intercambio. Noté que la mitad de las veces no recuerdo las conversaciones del día anterior por considerarlas intrascendentes.
Tampoco es que yo los crea a todos estúpidos. Bueno, sí. El ser humano es en esencia un verdadero idiota, claro que yo voy incluida en eso. Yo soy tonta como la otra gente. Por eso también de canso de mí misma. Y eso es lo peor, como esta semana. Los odio a todos empezando por mí. Odio a todos los escritores, odio todos los libros, odio toda la música, odio a todos mis amigos, odio a las personas amables que me ayudan, odio a la gente mamona, odio viajar. Cuando lo pienso me duele la cabeza.
Necesito un descanso de mí y de los otros. Por eso empezaré a correr a partir de mañana.
He notado que los deportistas son personas felices. La razón es muy simple: el oxígeno es el enemigo número 1 de las ideas. Traten de pensar en un artista que imagine su obra al aire libre. No! Todos gustan de los lugares cerrados, oscuros, húmedos y apestosos a cigarro. Ahí es donde pueden encontrar un medio sucio y adecuado para sus ideas. Y la gran mayoría fuma. Por qué? pues muy sencillo, para que las células no se oxigenen y permanezcan sabias. De ahí la genialidad de aquella gente.
Además sabemos que los deportistas no suelen ser personas muy brillantes, por más perfumes que aparezcan con su nombre. El oxígeno en el cerebro toma el lugar de conceptos, nombres y recuerdos por igual. Debe ser bello. Mírenlos, trotando por la vida como si no hubiera un mañana.
Está decidido. Hay un parque por mi casa y una agradable vista de pueblito sesentero. Ahora sí, a correr por las mañanas y a quejarse por las noches de calambres y torceduras.

No hay comentarios: